Si ya llevas un tiempo, unas semanas o meses, poniendo tus finanzas personales en orden, te ajustas a tu presupuesto sin demasiados problemas, no tienes deudas o has creado un plan para pagarlas y te está funcionando y has reducido tus gastos y mes a mes ahorras siempre una cantidad de dinero con lo que vas formando tu fondo de emergencia.
Posiblemente te estés empezando a preguntar cuándo empezar a invertir.
Ya has comenzado a leer información sobre el tema y te esta “picando el gusanillo” deiniciarte en la inversión, en particular en el mercado de acciones, que te parecerá mucho más divertido y excitante. Ves que con las acciones se puede conseguir un 8% anual promedio y ya tienes una cierta cantidad de dinero que puedes usar para invertir.
Sin embargo invertir es, sin duda, lo más difícil de las finanzas personales. Es necesario hacerlo, sin la inversión es casi imposible ser financieramente independiente algún día pero el salto hay que hacerlo con cuidado, sabiendo bien donde te metes para no llevarte sorpresas desagradables después.
Si tienes suerte y comienzas a invertir en un momento en que todo está subiendo, es muy probable que te confíes y que pienses que no era tan complicado, que te parezca muy fácil invertir, te confíes e inviertas más dinero del que realmente deberías y cuando venga una mala época y tus acciones empiecen a bajar, te pongas nervioso y vendas en el peor momento perdiendo mucho dinero.
¿Qué debes hacer antes de empezar a invertir?
Existen dos criterios básicos que debes mirar y tener muy claros antes de comenzar a invertir, y más, si vas a invertir en acciones de empresas individuales.
Si no has hecho estos puntos, tus cimientos financieros no son lo suficientemente sólidos como para que empieces a invertir. En lugar de invertir, debes coger ese dinero que ibas a dedicar a la inversión y ponerlo en el cumplimiento de esos objetivos antes de anda.
No tienes deudas de alto interés
Esto significa que no tienes saldos de tarjetas de crédito sin pagar ni préstamos personales más allá de la hipoteca. Básicamente cualquier deuda con un 8% o más de interés podemos incluirla en este tipo, deudas de alto interés. Antes de comenzar a invertir, elimínalas completamente.
En caso de que solo tengas una hipoteca como única deuda, debes tenerla completamente controlada, sin problemas de pago al mes. Personalmente no comenzaría a invertir si la cuota de la hipoteca me lleva más de un 25% de mi sueldo mensual.
Tienes un fondo de emergencia creado
Este fondo debería ser, como mínimo, capaz de cubrir 3 meses de gastos. Aunque lo más recomendable es que al menos sean 6 meses para ser un poco más conservadores.
Este fondo de emergencia tiene que estar en un producto financiero sin riesgos y al que puedas acceder en todo momento, es decir, un depósito sin penalización por cancelación o una cuenta de ahorros, ambos con un tipo de interés al menos igual o superior a la inflación para no perder poder adquisitivo.
Por último hay una cosa que también debes hacer antes de saltar hacia la inversión: Saber lo que estás haciendo.
Lee todo lo posible sobre inversión, los riesgos y los beneficios que puedes conseguir y hasta que no estés seguro no des el salto. No hay prisa por invertir, es cierto que cuando antes empieces mejor, pero la prisa puede hacer que pierdas mucho dinero.
Aquí tienes algunas páginas webs que leo regularmente para mejorar mis conocimientos sobre inversión:
- Inversor Inteligente
- Invertir en Bolsa
- Ferrer Invest
Invertir es divertido y emocionante y puedes conseguir grandes beneficios. Pero no te olvides de los riesgo. Pon tu casa financiera en orden antes de empezar a invertir.
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