Buenos y lluviosos días.
Llevamos unos días en Madrid que es imposible salir a la calle sin paraguas ¿verdad? Y es que en Madrid o no llueve nunca o se tira unos cuantos días que no para. En fin, dicen que la lluvia limpia un poco la polución así que no hay mal que por bien no venga.
En estos días de lluvia y mal tiempo, en los que todos nos ponemos un poco melancólicos y reflexivos, puede ser un buen momento para hablar sobre materias que te hagan reflexionar y pararte a pensar sobre aspectos muy importantes de tu vida y, en este caso, de tus finanzas personales.
Y uno de los asuntos más importantes para tu economía doméstica es decidir si comprar o alquilar una vivienda.
Hace tiempo que te hable de mi visión de este asunto pero en este tiempo he visto, tanto en mi entorno como en la sociedad en general, unos ciertos síntomas sobre este tema muy curiosos.
El punto en cuestión es que si hace unos años, los años precrisis, alquilar era tirar el dinero y lo que todo el mundo tenía que hacer era comprar, ahora resulta que es todo lo contrario.
¡No se te ocurra comprar, viva el alquiler!
Ahora todo son ventajas para el alquiler y la compra es una decisión nefasta que arruinará tu vida.
Y es que como pasa siempre, en cualquier tema pasamos del “blanco al negro” y viceversa con una rapidez increíble.
En el tema que nos toca, es de vital importancia tener las ideas muy claras ya que comprar o alquilar una casa es una decisión de suma importancia para tu vida.
Hoy quiero que veas que no todo en el alquiler es maravillo y que la compra tiene importantes ventajas.
Alquilar o comprar una vivienda
Las razones por las que el alquiler es mejor que la compra ya las tienes en el artículo que te he enlazado anteriormente (aquí lo tienes otra vez).
Sin duda, la principal ventaja del alquiler sobre la compra es que te permite tener más dinero disponible para invertir.
Esto es así porque el coste total del alquiler es inferior al coste total de la compra, si hablamos de la misma vivienda, claro.
Invirtiendo el dinero sobrante, puedes crear una cartera de activos que te proporcionen un flujo de dinero constante y pasivo hacía tu bolsillo. Por lo que, en unos años tendrás un dinero extra todos los meses.
Esto es así durante los años en que estás pagando hipoteca. Ser inquilino te permite hacer más inversiones que ser “propietario” (lo pongo entre comillas porque mientras estás pagando hipoteca realmente una parte importante de la propiedad de la vivienda es del banco).
El coste mensual de una casa, con el pago de la hipoteca, el seguro, impuestos y demás es mayor que el coste de un alquiler. Y esta diferencia puedes y debes aprovecharla para invertir.
Sin embargo, cuando ya eres el dueño de la casa y ya no tienes hipoteca que pagar, las tornas se cambian.
Ahora, siendo al 100% propietario de tu vivienda, tienes más dinero disponible que si eres inquilino.
Sumándole que eres el propietario de una activo que, con el tiempo, irá aumentando su valor (si, no siempre pero a largo plazo valdrá más).
Sin olvidar la tranquilidad que te aportar tener un techo para vivir el resto de tu vida que también puede ser heredada por tus hijos y nietos.
Una ventaja de comprar una vivienda frente al alquiler que me parece muy importante y que no he visto resaltar demasiado es que tener que pagar una hipoteca todos los meses te hace cumplir una determinada disciplina financiera que tal vez de otra forma no harías.
¿Estás seguro de que, si estás de alquiler, vas a invertir la diferencia o te la vas a gastar en compras innecesarias?
Esto es algo que pagando una hipoteca no puedes hacer. Tienes que pagar tu hipoteca como un reloj cada mes por lo que gastarás menos en cosas innecesarias.
Si tienes suficiente voluntad para invertir estando de alquiler, enhorabuena, pero seamos sinceros, mucha gente no la tiene y al final de los años es muy posible que te encuentres sin casa y sin haber creado una cartera de activos.
El alquiler es una gran solución para una persona con una fuerte voluntad y disciplina financiera que está dispuesta a invertir e ir creando una cartera de activos.
Pero si no es así, y piensas que es bastante probable que eches mano del dinero que deberías estar invirtiendo para gastártelo, entonces la mejor solución es comprar.
Es importante conocerte a ti mismo y no engañarte. Decidir si comprar o alquilar es una decisión importantísima.
No te dejes llevar por las modas, piensa por ti mismo y conoce todas las ventajas y desventajas de cada decisión, que algunas no son tan evidentes en un principio pero si son muy importantes como el punto de la disciplina financiera.
¿Estás de acuerdo con lo que he escrito? Dímelo en los comentarios.